- Si usas MayúsCulAs aleAToriaMentE en tUs posTs...
- Si tienes más anuncios que una carrera de coches...
- Si actualizas una vez por cada gobierno...
- Si crees que los signos de puntuación son opcionales...
- Si escribs komo si fuera 1 mnj SMS...
Si eres bloguero e insistes en hacer algo de lo anterior, lo siento, hay motivos de sobra para odiar tu blog. La lista, que es más larga, la ha elaborado Ben Cook en Blogging Experiment, y no sería difícil de ampliar.
Si eres de los odiados —u odiosos—, no te preocupes, no es tan difícil enmendarse. Sólo hay que escribir con corrección, escoger buenos temas, tener algo interesante que decir... o, si te es imposible hacer lo anterior, incumplir totalmente estos requisitos, aunque sea de forma ficticia (esto es casi mejor).
Si lo que te interesa es que hablen de ti, que lo hagan, aunque sea mal. Personalmente, no puedo soportar los blogs que me tratan como si fuese idiota. Ni los condescendientes. Ni los que hacen un resumen de prensa acompañado de un comentario graciosillo. ¿De verdad que a nadie más le hartan cosas así?